CAPÍTULO TERCERO
3. EMPEZANDO LA SESIÓN DE HIPNOSIS DE VIDA ENTRE VIDAS
3.1. La Inducción del Cliente
VEV.
No
dedicaré mucho tiempo a revisar la inducción, puesto que los nuevos
practicantes de VEV ya tienen, (o deberían tener), experiencia en este campo
básico de la hipnosis. Sin embargo, haré un par de observaciones sobre la
inducción que atañen a la regresión espiritual. Normalmente, la elección de una
inducción rápida o lenta, y el uso de un enfoque autoritario o permisivo,
dependerá de su evaluación sobre la receptividad del cliente. Por lo
general, las inducciones rápidas funcionan bien con;
·
sujetos obedientes o adaptables, que cumplen.
·
los sugestionables;
·
los clientes que son tan hiperactivos que no puede relajarse
y requieren una rápida liberación, y;
·
las personas que han estado en hipnosis cierto número de
veces antes de acudir a usted.
La inducción lenta y permisiva funciona bien con;
·
los inflexibles;
·
los analíticos que están en guardia para no ser controlados;
·
los sujetos que reaccionan bien a un enfoque más suave.
He mencionado los principios generales de la inducción, y su aplicabilidad a los clientes, porque quiero dejar claro que recomiendo una inducción lenta y regulada para todas las regresiones espirituales. Este enfoque combina bien con las técnicas de prolongada profundización que empleamos en la técnica. Mientras que las etapas superiores, las Alfa, funcionan bien para la regresión a vidas pasadas; por lo general se requiere el más profundo estado, el Theta, para el trabajo de regresión a la vida entre vidas.
Ciertamente,
el ritmo de inducción y profundización es una decisión personal, pero la razón
por la que doy este consejo es que en el trabajo de VEV, cada etapa de la
hipnosis debe vigilarse cuidadosamente.
Sin
embargo, tengo otra razón para ir poco a poco, para movernos con
lentitud. Deseo crear una escena etérea en mi consulta, para mejorar un
estado de ánimo trascendente dentro de la mente consciente del
cliente. Incentivos como, un breve fondo de suave música espiritual, y el
uso de la llama de una vela para la fijación de la mirada, permiten una
conexión transcendente con la luz y el sonido. He tenido sujetos que me
han dicho, después de la sesión, que la llama dorada en el cuarto oscuro les
representó un faro hacia el mundo del espíritu. Animo a tener, o crear,
este tipo de percepción cuando doy las instrucciones hipnóticas, y voy midiendo
los progresivos efectos relajantes que se van produciendo en el cuerpo del cliente
a medida que progresa el ejercicio de relajación corporal. Es aquí, donde
el sujeto se acostumbrará al tono y a la cadencia de su voz, por lo que se
abordará este tema, extensamente, más adelante.
3.2. Etapas de la Hipnosis
Ya he
dado al nuevo cliente un ligero vistazo de conjunto sobre los niveles de
consciencia llamados, Beta, Alfa, Theta y Delta, durante la entrevista
preliminar. Para los terapeutas VEV, me gustaría reforzar el saber
profesional de que, en el estado Beta, las pequeñas fluctuaciones de la energía
de las ondas cerebrales son estrechas y compactas, ya que se suprimen por la
mente consciente. En cambio, las Alfa y las Theta, son ondas más grandes,
que implican fluctuaciones de energía más abierta. Creo, que las ondas más
grandes ponen al descubierto profundos recuerdos sin interferencia consciente.
Al mismo tiempo, la información recién expuesta por estas ondas más grandes se
integra dentro de la mente consciente, tal vez porque parte del cerebro se
mantiene en el estado de Beta, durante la hipnosis.
Cuando
me preguntan por una descripción más visual de las zonas de almacenamiento de
los recuerdos del alma, uso un diagrama simple para ilustrar las etapas de
movimiento a través del consciente, subconsciente y, finalmente, al interior de
la mente superconsciente.
Imagine
que la mente tiene tres círculos concéntricos, de tamaño progresivamente más
grande, uno dentro del otro. Los tres anillos no constituyen una rígida
división que separa a uno del otro, aunque se ven de esta manera al dibujarlos
en papel. Los veo, más, como capas porosas en un sistema de filtrado del
pensamiento humano. Visualice una piedra arrojada al agua que genera en su
superficie ondas concéntricas que se alejan, centrífugamente, desde el centro
del impacto.
La
primera capa, la exterior, representa a la mente consciente, el centro de
razonamiento cotidiano, crítico, analítico y luchador. La segunda capa, la
del medio, es la mente subconsciente, donde todos nuestros recuerdos físicos,
incluyendo las vidas pasadas, se almacenan. También es el centro de la emoción
y la imaginación. Las personas creativas, llamadas de, "cerebro
derecho", parecen ser capaces de aprovechar esta área con más facilidad
que los que son dominantes de hemisferio izquierdo.
En las
profundidades del núcleo central de estos anillos concéntricos se encuentra la
mente superconsciente, que alberga los recuerdos del alma divina.
La utilización de las etapas de hipnosis, nos da la capacidad de pasar por dentro, por fuera y por entre estos niveles mentales que unen nuestros recuerdos conscientes, inmortales y divinos. Nuestra eterna alma-mente, ha evolucionado a partir de una fuente de energía de pensamiento conceptual superior, más allá de lo que podemos imaginar. La mente superconsciente revela nuestro carácter inmortal, y su larga historia. Así, en el estado de ondas, Theta, ganamos perspectiva sobre nuestros orígenes, todas nuestras pasadas vidas, la vida entre vidas, y los seres que nos han ayudado a avanzar. La experiencia es sublime.
La utilización de las etapas de hipnosis, nos da la capacidad de pasar por dentro, por fuera y por entre estos niveles mentales que unen nuestros recuerdos conscientes, inmortales y divinos. Nuestra eterna alma-mente, ha evolucionado a partir de una fuente de energía de pensamiento conceptual superior, más allá de lo que podemos imaginar. La mente superconsciente revela nuestro carácter inmortal, y su larga historia. Así, en el estado de ondas, Theta, ganamos perspectiva sobre nuestros orígenes, todas nuestras pasadas vidas, la vida entre vidas, y los seres que nos han ayudado a avanzar. La experiencia es sublime.
El
hipnoterapeuta VEV, moviendo cuidadosamente a los sujetos a través de las
etapas más profundas de la hipnosis, encontrará que algunos clientes requieren
más profundización en unos niveles que en otros. Usted no puede adelantarse a
su cliente, o retrasarse demasiado. No hay una fórmula establecida para la
receptividad del cliente. Algunas personas, tendrán que profundizarse más
que otras para adquirir información acerca de sus vidas pasadas, y el mundo
espiritual. Los sutiles efectos de las diferentes etapas de la hipnosis pueden
variar entre sujetos.
El
aspecto maravilloso de este campo es que, con su ayuda, la mayoría de los
clientes parecen ser capaces de encontrar su propio nivel de trance necesario
para acceder a sus vidas pasadas y recuerdos de VEV. Es como si tuvieran
incorporado un mecanismo automático, descubridor del alcance de profundidad
adecuado o necesario. Cada sujeto tiene su propia sintonía mental dentro
de los niveles de profundidad existentes. Tenemos estadísticas que
indican, en líneas generales, la receptividad de los sujetos, a la
hipnosis. Las encuestas nacionales en los Estados Unidos de Norteamérica
indican que, alrededor del 10 al 15 por ciento de la población es muy sensible,
mientras que del 70 al 80 por ciento, caen dentro del rango de moderadamente
sensible. Por tanto, del 10 al 15 por ciento de la población, o no
responde, o es mínimamente sensible a la hipnosis y, en este grupo de clientes
poco sensibles, los que finalmente lo logran, en su mayor parte requerirán
algún tipo de continua profundización, hasta que alcanzan la puerta del mundo
del espíritu.
Sin
embargo, una vez alcanzada la hipnosis profunda, el éxito en la recuperación de
la memoria espiritual de un sujeto no parece depender de su receptividad
inicial a la hipnosis, o la velocidad a la que se alcanzan ciertas
profundidades dentro de las diversas etapas hipnóticas. Existen más
indicadores fiables de una buena sesión de regresión espiritual. Si asumimos
que la profundidad del trance se asocia con el grado de desconexión del entorno
externo, los sujetos que están en un nivel que les resulta satisfactoria la
desconexión, estarán más comprometidos con sus visiones internas. Estos
sujetos estarán enfocados más directamente cuando respondan
preguntas. Esto es altamente deseable para la concentración.
Si el
cliente parece hacer asociaciones libres, o se pronuncia con vaguedad en sus
respuestas, eso apunta a un exceso de conexión consciente y, en ese caso, el
(poco) grado de profundidad del trance suele ser la causa. Mis
estudiantes, VEV, que son hipnoterapeutas profesionales antes de entrar en la
formación de regresión espiritual, hacen la siguiente pregunta; "Si la
revivificación produce un mayor vínculo en la regresión a vidas pasadas, ¿esto
es también válido para la regresión de vida entre vidas?". Yo les
contesto que no, en particular, y les explico el porqué. La revivificación
significa revivir un acontecimiento del pasado, en lugar de
observarlo. Cuando un sujeto es absorbido por su participación activa con
un cuerpo anterior, los cinco sentidos están plenamente comprometidos en la
recuperación de los recuerdos.
Encuentro,
que volver a experimentar una existencia en el mundo del espíritu no requiere
la revivificación para obtener mejores resultados, porque, en este caso estamos
en estado de alma y, por tanto, en estado inmaterial. Sin duda, estar en
un estado de sonambulismo profundo, (el estado Theta), puede mejorar el
descubrimiento de todo por uno mismo. Aun así, en ese caso, no me
encuentro con una mente observadora, (lo que es una característica típica de un
nivel más superficial de hipnosis), y eso es restrictivo para recibir
información sobre el mundo del espíritu. A mi juicio, los sujetos en un
estado del alma superconsciente son capaces, tanto de observar mentalmente,
como de participar, es decir, revivificar. No obstante, el regresionista
espiritual necesita poner mucha atención sobre la profundidad del trance.
3.3. Profundización y
Visualización.
Al igual
que sucede con la inducción, hay muchos textos que se refieren a los métodos de
profundización en la hipnosis. No los detallaré aquí, a no ser que su
aplicación sea necesaria para la regresión espiritual. Con los clientes de VEV,
empleo largas, y guiadas sesiones de visualización de imágenes. Por lo tanto,
no profundizo utilizando el método de fraccionamiento, que consiste en
despertar y reinducir al sujeto, ni el método de sugestiones piramidales, para
crear desorientación y sobrecarga sensorial mediante un mal direccionamiento.
En vez de involucrarme en técnicas de confusión para combatir las reacciones
defensivas del sujeto, cuestiono algunos desafíos del cliente a través de
ejercicios que promueven movimiento motor del cuerpo, y trabajo con la
relajación progresiva.
Durante
los períodos en estas etapas de profundización, voy a tratar de fomentar en el
cliente, una experiencia, "fuera-del-cuerpo", como preparación para lo que vendrá más
adelante, en su estado de alma. Puesto que el carácter inmortal del alma
siempre será parte de la psique del sujeto, con independencia de la profundidad de la hipnosis emplearé
afirmaciones tales como esta; "Como ser inmortal de pura luz inteligente,
permite a tu consciencia humana flotar dentro de esa luz, que es real para
ti".
Puedo
invertir hasta cuarenta y cinco minutos en ejercicios de profundización con la
visualización de largas escenas de hermosas montañas o playas. El uso de un
conjunto detallado de imágenes, para alterar la dimensión cognitiva de la
experiencia, y aumentar la conexión emocional, también se realiza de manera
progresiva. Lo que busco, es la total absorción del sujeto en escenas
encantadoras, donde se ve a sí mismo en movimiento hacia una meta, y lo hace de
la misma manera en que yo quiero que experimente, más tarde, su viaje
espiritual a casa. Uso caminos y senderos, escaleras, "caleyes",
hundimiento en cálidas arenas, suave hierba o piscinas de agua y, siempre,
tengo al cliente flotando, preparándolo para pasar a su estado de
alma. Estas visualizaciones progresivas, son también auditivas y
quinestésicas, y pretenden, tanto una profundización, como la preparación del
sujeto para lo que le aguarda más adelante, en el proceso de regresión.
De esta
forma, además de la profundización, mis
visualizaciones tienen la intención de ser simbólicas en un sentido
Ericksoniáno, ya que se diseñan para facilitar el paso al reino etéreo del
mundo espiritual. Puesto que he recibido formación Ericksoniána, siento
que las técnicas más formales y autoritarias son las más efectivas en el
trabajo de Vidas Entre Vidas. No obstante, utilizo una aproximación permisiva y
metafórica a la visualización. Intento integrar la historia que cuento, con la
personalidad, intereses, actitudes y niveles emocionales de mi cliente, para
transmitir mensajes significativos, llenos de contenido. Aunque no siempre lo
logro, deseo hacer descripciones que se adecuen a los fines de la, VEV, es
decir, a los de seguridad, paz y curación a través del uso, tanto de
sugestiones directas, como indirectas, mediante la imaginación guiada por escenas
adecuadas. He aquí dos ejemplos condensados:
"Ahora; quiero
que se vea a si mismo moviéndose hacia fuera; saliendo lejos de esta sala;
subiendo, más, y más alto, y moviéndose en la distancia; hacia una cadena de
montañas. Sienta las corrientes, suaves y cálidas, del aire a su alrededor,
a medida que pasa, flotando, entre nubes lanosas y blancas, en un día calmado y
tranquilo. Usted se siente ingrávido mientras flota y se deja llevar sin
esfuerzo, más y más cerca de las montañas. Pronto se pasa la primera fila de montañas y se deja caer, más y más,
hacia una hermosa pradera en un valle que ve bajo usted. (Pausa). Más
y más bajo, ve que la pradera está completamente rodeada
por árboles muy altos, árboles majestuosos. La pradera es un santuario
totalmente protegido. A medida que llega al nivel del suelo, y se acerca a
la pradera, usted comienza a flotar alrededor del exterior de este círculo,
perfecto, de altos árboles, mientras trata de encontrar una camino a través del
cual pueda pasar el círculo de árboles y, así, llegar al centro de este lugar,
tranquilo y mágico".
Continuaré
con esta historia, trabajando en encontrar el camino, como si un poder
invisible dirigiera a mi cliente. Tras pasar el acceso a la pradera, (lo cual
representa entrar en el mundo del espíritu), iré introduciendo otros símbolos,
tales como rayos solares dorados que forman un escudo protector de cálida luz,
que vienen desde lo alto, (esto da seguridad), y mencionaré colores brillantes,
aroma de flores y trino de bellos pajarillos, (efecto de encantamiento).
Puedo
decidir situar al cliente en una escena de playa, con interminables quilómetros
de arena cálida, (inmutable tranquilidad), gaviotas volando en círculo sobre su
cabeza, (libertad), y espuma blanca, (pureza) de ondulantes olas marinas,
(sonido reconfortante). Si el cliente está a gusto con el agua, podría
introducir una piscina de agua fresca en el escenario, (idea de limpieza). El
uso del tiempo en una escena denota infinitud. Lo que sigue a continuación es
un corto ejemplo de este tipo de visualización.
"Sienta cómo se
despega, más y más, mientras flota hacia abajo, siendo capaz de respirar
fácilmente porque es como si usted flotara, sin esfuerzo, a través del tiempo y
del espacio. Siente, que le rodean suaves y cálidas corrientes que gentilmente
acarician su cuerpo mientras usted se mueve como si fuera a la deriva, bajando
y bajando, viendo burbujas de redondez blanca y translúcida que pasan flotando
a su lado mientras se elevan más y más alto, lejos de usted, que se deja caer
más y más bajo. Pronto, usted se encuentra completamente sumergido, desde la
coronilla de su cabeza a la planta de
sus pies, en su propia iluminación interior, como si se moviera a través del
agua, penetrando en el vacío del espacio y el tiempo. El tiempo fluye como un
río que traspasamos mientras nos movemos a través de él..... a veces con la
corriente.... a veces cruzamos la corriente.... no se resiste al flujo, no se
resiste a la corriente sino que, mas bien, se deja ir a la deriva, flotando sin
rumbo, sin cuidado ni preocupación, yendo a ese lugar especial en el que usted
necesita estar como en un sueño".
Si bien
las técnicas de profundización extensiva son un factor importante en la terapia
de VEV, quiero hacer hincapié en que la duración de una sesión de tres a cuatro
horas, crea un alto grado de desconexión. La mente del sujeto se disocia
más del cuerpo, con un aumento de la distorsión del tiempo lineal. Si
usted ha llevado a cabo una, o dos, sesiones más cortas con su cliente antes de
la regresión espiritual real, tanto mejor, pero eso no significa que usted
debería apresurar las secuencias de visualización, en la sesión más larga de
VEV, para ahorrar tiempo.
Durante
la fase de regresión espiritual, tendrá que proceder lentamente, de escena a
escena, antes de alcanzar el segmento de la muerte de la vida pasada del
cliente. Durante todo este tiempo, es posible que vea la necesidad de
seguir profundizando la hipnosis. La combinación de contar mientras se
respira, también es muy eficaz. Veamos un ejemplo de Preparación para la
transición a una vida pasada:
"Sea más
consciente de su respiración lenta. Cada respiración, le lleva, más y
más profundo. Mientras cuento de
diez a uno, haga una respiración con cada número, y sienta, cómo se aleja, más
y más, con cada número que pronuncio, acercándose usted, con ello, más y más,
hacia el túnel del tiempo que está esperando por usted".
Ya he mencionado cómo la propia brújula, o compás,
mental del cliente, dentro de su elevado ser espiritual, le ayudará a alcanzar
la profundización necesaria para recuerdos específicos. Por otra parte, se debe
estar atento a los dos campos diferentes de energía magnética que se activan
entre las mentes de cliente y facilitador que trabajan juntos. Traigo este
concepto de nuevo para recordar al regresionista espiritual que la voz es otro
medio de llegar a través del campo de energía del sujeto, y es útil tanto en la
eliminación de bloqueos emocionales, como en la profundización.
3.4. Ritmo y Uso de la Voz.
Trato de
que coincida, la resonancia vibratoria de mi voz, con los tonos de voz del
sujeto, para reflejar su estado de ánimo; para conectar y ayudarle a entrar en
el estado de trance adecuado. Su tono de voz y cadencia como facilitador,
comienza con la inducción, y se mantiene, como poderoso instrumento de sonido,
a lo largo de toda la sesión de VEV, proporcionando al cliente, tanto ritmo
como impulso. Con cuidado, fije el ritmo y use diferentes inflexiones de
voz, lo que comportará la modulación de la misma para dar ánimo, en forma suave
o tajante, según convenga al caso, y sume a ello técnicas de tranquilización.
Todo esto es de gran importancia durante un largo viaje mental.
Si bien
no puede ser plenamente consciente de lo que un sujeto experimenta en un
momento dado de su regresión espiritual, usted quiere transmitirle el hecho de
que está siempre implicado e interesado en lo que está pasando con su
tratamiento. Yo trabajo en la entonación de los tonos vibratorios de mi
voz, para que coincidan con el sonido y tipo de respuestas que vienen de la sesión
VEV del sujeto. Esto empieza con las primeras instrucciones que le doy al
cliente, y se acelera durante la profundización de la hipnosis. Puede ser
necesario matizar el tono, a medida que la sesión progresa y las reacciones del
sujeto cambian. Antes de la llegada del cliente, me tomo unos minutos para
ejercitar el rango de mi voz y sostener ciertas notas, especialmente en el
registro de las más bajas. Calibrar mi voz con la que tiene el cliente de vez
en cuando, fomenta la fusión de la energía vibracional.
Manipular
el sonido, para sincronizarse con las ideas que se transmiten, es particularmente útil cuando se
trabaja con imágenes. Pienso, que ello ayuda a hacer imágenes más
identificables y llenas de sentido para el cliente. A medida que las escenas se
despliegan en la mente del sujeto, el facilitador debe tratar de mantener el
ritmo de las transiciones, visuales y emocionales del cliente, que se producen
de escena en escena. Cuando un cliente conecta, e integra, escenas
espirituales, puede moverse rápido, a velocidad moderada, o muy lentamente.
Pienso, que es deseable que, cliente y facilitador, igualen sus tempos y
volumen. Es mejor ser paciente y esperar, hasta que el sujeto ha respondido
completamente a la pregunta, antes de moverse a la siguiente escena.
3.5. Instrucciones Hipnóticas
Finales, antes de pasar a la Regresión.
Tras un
considerable período de profundización hipnótica, a través de largas
visualizaciones, doy al cliente VEV, la siguiente serie de instrucciones:
"Quiero que
confíe en su capacidad para contemplar las escenas, de usted mismo, que verá en
tiempos diferentes y en diferentes lugares y, también quiero que confíen en su
habilidad para sentir las emociones que estén conectadas con esas imágenes.
Además, quiero que me informe de todo aquello que necesito saber, sin ningún
tipo de censura por su parte. Yo seré su guía en el viaje que haremos juntos, y
otros, a quienes usted ha conocido y amado, se nos unirán, incluyendo a su guía
personal, quien vendrá en nuestra ayuda y nos proporcionará comodidad y fuerza.
Al principio, solo
mire las escenas y dígame lo que pueda, con total confianza. A medida que
progresemos, sus recuerdos irán mejorando. Verá más, aceptará más de lo que ve
y tendrá gran entendimiento sobre lo que verá y sentirá de forma que, pronto,
será capaz de ayudarme a evaluar lo que ve y lo que siente.
Además, según vaya
reexperimentando las emociones y sentimientos conectados con épocas anteriores
a nuestro tiempo, y a otros cuerpos y a todo lo que usted ha sido antes,
empezará a sentir una positiva liberación de cualquier carga mental del pasado.
Todos sus recuerdos se colocarán en la perspectiva adecuada, y se integrarán en
su vida actual, para llevarle a una perfecta armonía con usted mismo.
Ahora, antes de
movernos, quiero que visualice que le voy colocando a su alrededor un escudo de
luz, dorado y traslúcido, un escudo que va de la cabeza a los pies, que le
protege de toda fuerza exterior y que le
proporciona calidez, resplandor, luz y poder. Cualquier recuerdo negativo del
pasado que pudiera venirle, rebotará sin causar daños en su escudo de luz
protectora".
Por supuesto, hay muchas variaciones para esta
instrucción y estoy seguro de que usted desarrollará mecanismos protectores
para sus clientes de VEV, que se adapten a su propio estilo de trabajo. Por
ejemplo, hay otro comando u orden que podría tener en cuenta en este punto del
proceso. Una sesión de tres o cuatro horas de VEV implicará largas
conversaciones entre usted y su cliente. Hablar, no siempre es fácil para
algunos clientes en estado de trance profundo. Hay clientes que tienen
dificultades en sostener su nivel de hipnosis mientras mantienen una
conversación de cierta extensión. En esos cosos, la sugestión que practico
podría ser de este tenor:
"Será capaz de hablarme, libremente, sobre cualquier
cosa, y sin despertarse. De hecho, las largas conversaciones que mantendremos
entre nosotros solo servirán para mantener, y mejorar, su trance profundo. En
este tiempo, mientras estamos juntos, usted oirá mi voz claramente, y yo oiré
su voz con igual claridad. Nuestra conversación privada le confortará, le será
cómoda, agradable y le ayudará a desconectar del mundo exterior".
3.6. Retrocediendo en el
Tiempo.
Una de
las razones, para empezar con la niñez del cliente es acelerar, más fácilmente
el, por así decirlo, precalentamiento de la memoria, lo que nos preparará para
enfrentar posibles dificultades en el proceso de recordar que pueden surgir más
tarde. Cada terapeuta desarrolla su propio formato. Yo, empiezo manteniendo al
sujeto visualizando una larga, curva y dorada escalera situada en el cielo, en
la que, cada paso, representa un año de su vida. Obviamente, usted debe
comprobar, de antemano, la edad del cliente para saber cuán larga debe ser esa
escalera. Mis instrucciones, en este punto del procedimiento, son como sigue:
"Vamos a ir hacia atrás, en el tiempo, año tras año, a
su infancia, para que busque, sólo, recuerdos felices. Su mente, mantiene los
recuerdos de todo lo que ha experimentado desde la edad en que lo registró.
Usted lleva, todos esos recuerdos, en su mente adulta, que es más conocedora,
que es más amplia.
Según descienda esta escalera, usted va hacia atrás en el
tiempo, en dirección a su infancia. Se encontrará retrocediendo hacia la infancia,
cada vez, más, y más atrás, con cada paso que da bajando los peldaños. Será,
como si yo pasara las páginas de un antiguo álbum de fotos, en el que usted se
verá, más, y más, joven y más, y más pequeño, a medida que desciende más y más,
bajando la escalera. Cada vez que detenga en un peldaño de la escalera, tendrá
la edad que representa ese peldaño".
Si me
doy cuenta de que el cliente no está en trance tan profundo como debiera en ese
momento, puedo darle también, un ejercicio adicional que incluye contar. Por
ejemplo:
"Según cuento de cinco a uno, nos acercaremos al paso
más alto de esta larga escalera, mientras usted continúa desconectándose, más y
más, de su cuerpo. Cinco,... ahora se
libera, de su cuerpo físico, más y más, de un modo relajante y seguro, más y
más profundo. Cuatro, ... va más allá, entra en el profundo dominio mental,
(espiritual), de su mente... Tres, ... va hacia el peldaño más alto de la
escalera... Dos, ... siente la ligereza, la levedad. Es como si fuera a la
deriva y flotase. Flota, libremente. Ahora, muy cerca del peldaño más alto,...
¡Uno!".
Antes de
empezar a contar hacia atrás desde la edad actual del cliente, por la escalera
de su vida, normalmente pido una señal ideomotriz. (En psicología, es una
actividad motora dirigida por una idea). La señal puede ser como esta:
"Levante los dedos de su mano derecha cuando esté
listo para abandonar, de forma segura, el peldaño más alto. Cuando lo haga,
empezaremos, juntos, a bajar la escalera y, con ello, retrocederemos en el tiempo".
Si el
cliente muestra signos de duda o vacilación, puedo convertir la escalera en un
rápido ascensor, o en una escalera mecánica en la que el sujeto se verá, a si
mismo bajar, sin el esfuerzo de ir peldaño a peldaño.
Mientras
cuento hacia atrás bajando la escalera, con frecuencia me salto números y,
rápidamente me muevo a la edad de veinte años, a partir de la cual ralentizo la
cuenta regresiva. Podría, entonces, parar a la edad de 12 años, y sugerir al
cliente que flote, desde la escalera, al patio o jardín, o espacio que hay en
frente de su casa, (o apartamento), en la que vivió a esa edad. Pido a los
clientes, (con la lógica adaptación al tipo de morada que se tuviera), que me
describan el tamaño y color de su casa, y si pueden ver altos árboles a
izquierda, a derecha, o tras el lugar en el que permanecen de pie contemplando
su hogar. Entrando a continuación en la casa, les llevo a una habitación que
les sea familiar, por ejemplo, el dormitorio, y les pregunto por la posición de
muebles, tales como la cama, o la cómoda, en relación con la puerta de acceso a
la alcoba. Miramos dentro del armario, y les pregunto por el vestido favorito
que se ponía para ir a la escuela, o para jugar. Tras volver a la escalera y
bajar hasta la edad de siete años, flotamos de nuevo hacia adelante, a su casa
otra vez, (que con frecuencia podrá ser otra casa), y allí preguntaremos, solo,
por mascotas o juguetes.
Este
primer ejercicio de recuperación de recuerdos, se enfoca en que el cliente
aprenda a identificar objetos, y su situación física en relación con esos
objetos; así como a verse cambiando de apariencia con la edad. Mientras
preparamos al sujeto para el tipo de visualización espacial que pronto
encontraremos en vidas pasadas, y en recuerdos espirituales, al mismo tiempo yo
aprovecho para comprobar la profundidad del trance. Por ejemplo, si pregunto a
una paciente, de doce años, que identifique su joya preferida, y me dice;
"Déjeme pensar, no puedo recordar si tenía algo que me gustaba
ponerme", entonces sé que está usando su memoria consciente para tratar de
recordar información pasada, en vez de usar la memoria inconsciente, que es en
donde, en realidad, está y, de usarla, me informaría de la escena con una
respuesta rápida. Por tanto, debería profundizar el trance.
Me
referiré a las interferencias conscientes, y a clientes con falta de respuesta,
en otras secciones que veremos más adelante. En este momento de la sesión, debe
tener en cuenta que, la incapacidad para responder correctamente a preguntas de
una etapa de recuperación de la infancia, puede ser la primera señal, clara, de
la falta de profundidad del trance adecuado, independientemente de las pruebas
de hipnosis que haya hecho antes, o el rendimiento de la sesión hasta este
momento.
Si todo
va bien, a continuación llevo más atrás al cliente, a sus más tempranos
recuerdos como niño y, finalmente, al útero, al momento justo de antes de
nacer. Le aseguro al cliente que es una transición fácil, porque ahora en muy
joven, (con dos o tres años de edad), y no tendrá problemas en hacer el
descenso mental al vientre de su mamá.
3.7 Dentro del vientre
materno.
Hay
clientes, que sólo tienen vagos recuerdos acerca de ser un bebé en el vientre
de su madre. Ante esta falta de conciencia, el trance profundo tiene poco que
hacer. Con esta gente, solo empleo unos pocos minutos, preguntando si sus
brazos, piernas y cabeza están razonablemente cómodos, y qué es lo que oye, y
siente. "¿Puede usted oír el latido del corazón de su madre?", es un
ejemplo de posible pregunta.
Si el sujeto es incapaz de
responder con cierta extensión, en estado fetal, no le presiono, pues pudiera
ser un alma muy joven, o poco desarrollada.
Los
comentarios desde el interior del útero son mi primer contacto con el alma del
cliente, y el primer indicio sobre su particular estado de evolución como alma.
Existe una gran diferencia entre una persona que me explica cómo trata de
calmar a su madre ansiosa, y qué piensa frente a los desafíos de la vida que le
esperan, y otra que, solo, responde que está en un oscuro estado de limbo, sin
nada que hacer, ni nada que pensar antes de nacer.
Si tengo
ante mí un alma experimentada, fijo la atención en una serie de detalladas
preguntas sobre la integración del alma con su cerebro. Tomo cuidadosas notas,
que espero usar más tarde, en las partes más terapéuticas de la sesión. Lo que
sigue, son preguntas que he desarrollado para esos casos en los que interpelo,
directamente, al alma-mente del sujeto:
1. ¿En qué mes se unió al feto?
2. ¿Cuál fue su primera
impresión sobre el cerebro que ahora ocupa?
3. ¿Fue fácil, o difícil,
trazar las vías o conexiones de los circuitos eléctricos de ese cerebro?
4. ¿Qué es lo distintivo de
este cerebro?
5. ¿Qué ha aprendido sobre cómo
el sistema emocional de este cuerpo afecta al cerebro?
6. En general; ¿Cómo aceptó
este cuerpo la integración de su alma y si fue fácil o difícil?
7. ¿Cómo es este cuerpo, en
comparación con otros que haya tenido?
8. ¿Su alma-mente siente que
hace, o no, buen juego con este cuerpo, y por qué piensa eso?
9. ¿Por qué eligió este cuerpo?
Solo
efectúo esta última pregunta, la 9, si recibí respuestas concretas en las otras
pues, si no es así, trataré el asunto de las expectativas en la selección de un
cuerpo, más tarde, dentro de la sesión correspondiente.
Cerca
del fin de una sesión, VEV, cuando el cliente contempla su cuerpo adulto actual
por primera vez, en la habitación de la selección de vida, usted podría valorar
recuperar las respuestas a estas preguntas que se hicieron en el útero materno,
para ganar más entendimiento.
Con
frecuencia, encontrará que existen factores inhibidores para la integración en
el vientre materno. Además de una resistencia cuerpo-mente o, como dicen
algunos clientes, una pesada o densa mente, existe un segundo factor que es
restrictivo para el alma durante su estado de vida fetal. La mente de la madre
puede estar cerrada hacia su bebé, bien por causas emocionales, o por trauma
físico, todo ello relacionado con ansiedad, miedo, depresión, ira o,
simplemente, porque la maternidad no es querida. Estos factores negativos
pueden ser evidente con el primer niño de una madre muy joven, especialmente si
no está casada. Puede haber sentimientos de desagrado sobre el estar encinta,
con un bebé no querido, o en un período tardío de la vida. Si la madre tiene un
matrimonio sin amor, ello también puede causar que se le cierre la mente a la
perspectiva de estar preñada o continuar con la gestación.
Por
supuesto, las almas más experimentadas pueden sustituir gran cantidad de la negatividad
emocional de la madre, (y más tarde del mundo, si es el caso), mediante el uso
de sus campos de energía refinada.
Como
regresionista espiritual, es conveniente consultar con antelación, las
dinámicas familiares de los clientes Estos datos, pueden ayudarle en la
búsqueda de los aspectos positivos y negativos de la integración energética
entre alma y cerebro, que se inició dentro del útero.
He
listado en mi libro, "Destino de las Almas", varios ejemplos de
informes de clientes que hablan desde el interior del vientre materno. En ese libro,
ofrezco otro caso para demostrar la calidad de la información que un
facilitador puede obtener del cerebro de ciertos clientes avanzados. Este
informe, es un resumen del caso de Náncy, a la que considero una consumada
artista en el arte de la integración del alma en su cuerpo huésped. Veamos lo
que me dijo:
"Antes de entrar en el feto, normalmente observo el
cuerpo de la madre, entre el tercero y el sexto mes. Permito que mi energía se
filtre en ella por etapas para tocar, primero su mente y, a continuación, la
mente del bebé. Hago esto para armonizar mis vibraciones con las de las dos
mentes. Así es cómo preparo una suave integración. En mi actual vida, mi madre
estaba ansiosa y emocionalmente perturbada por mi venida, al ser su primer
bebé. Por tanto, emití energía hacia su estómago y pecho, para aflojar los
patrones de energía endurecida que percibía en esas zonas. Esto pareció ayudar.
Cuando me uno con cualquier niño, empiezo enfocándome más en la química y en
los impulsos eléctricos de su cerebro".
Náncy me comentó, que el emparejamiento con su actual
cuerpo era de los buenos, y que su mente no era torpe ni perezosa. Al oír esto,
le pregunté si alguna vez tuvo que unirse con mentes lentas en una vida
anterior, y qué pensó de aquellos cuerpos. He aquí lo que respondió:
"Desde luego que he tenido cerebros perezosos en mi
pasado. En esas vidas, mi alma necesitaba ser más dominante, estaba obligada a
imprimir mi ser en ese tipo de mente. En tales casos, el juego es construir
fortaleza, capacidades e influencia dentro de un niño perezoso. Por otro lado,
el desafío para un alma dentro de un niño que no tiene una mente rápida, es
permanecer enfocada con todos los impulsos y pensamiento del bebé y, aun así,
permanecer flexible".
3.8. La Transición a la Vida
Pasada.
Existen
varias, e importantes, razones para llevar a un cliente de, VEV, desde el útero
materno a su vida pasada, antes de franquear la puerta del mundo del espíritu.
La más profunda de ellas, es la necesidad que tiene una persona de experimentar
una escena de muerte para poder cruzar la puerta espiritual de una forma
natural. Mis estudiantes preguntan; "Esa vida de la que partimos ¿debe ser
la más inmediata de las vidas pasadas del cliente?", Mi respuesta es que
no, aunque yo preferiría que fuera esa vida anterior más inmediata, siempre que
sea posible y ello, fundamentalmente, porque, el fin de esa última vida fue,
también, la última vez que el cliente entró en el mundo del espíritu.
Otra
razón de que me guste usar la más inmediata vida pasada del cliente, es porque
es de lo más normal que esa vida sea la más relevante para su vida actual.
Podría haber asuntos kármicos directos de esa vida afectando hoy a su cliente,
así como huellas negativas provenientes de su anterior cuerpo. Ir a la fuente
de una huella, o impresión problemática, podría permitirle a usted
desensibilizar un residuo físico y emocional de su cliente. Aunque es cierto
que esto podría hacerlo más tarde, ya en el mundo espiritual, la intervención
directa, durante el proceso de revivir la vida pasada inmediata, haría el
reencuadre de la situación problemática mucho más efectivo.
A pesar
de su intención de entrar en el mundo espiritual a través de la inmediata vida
anterior del cliente, éste puede pasar por encima de sus intenciones y llevarle
a una vida mucho más anterior, una que tenga más significado para él. Aunque no
es lo común, puede ocurrir.
Al
empezar el procedimiento de regresión, ya le he dicho al cliente antes de dar
comienzo a la hipnosis que, moverse a través de las vidas pasadas, es parte de
mi secuencia maestra para su regresión espiritual. Por lo general, no me
detengo a explicar todas las razones, a no ser que el cliente manifieste alguna
objeción. De vez en cuando, un cliente podría decirle; "Mire, puedo alcanzar
la regresión a vidas pasadas en mi hogar, (o, "he tenido una regresión a
vidas pasadas anteriormente"), pero vengo a usted porque es un
especialista en este tema. Por tanto, ¿por qué, simplemente, no me lleva desde
el vientre de mi madre al interior del mundo espiritual, para ahorrar tiempo?
Para
algunos hipnoterapeutas, sé que será tentador intentar llevar a un cliente,
directamente, al mundo del espíritu sin pasar por una vida anterior,
especialmente si el cliente se lo pide. He experimentado en este tema y, por
ello, no solo lo desaconsejo sino que insto a que no se haga, por estos
inconvenientes que pueden surgir, y que cito a continuación:
A. Retroceder directamente,
desde la vida actual del cliente al mundo del espíritu, puede causar confusión
y desorientación en la mente del sujeto común. Esto se debe a que, en esta
situación, el cliente llega al mundo espiritual, digámoslo así, por la puerta
de atrás, en vez de por la principal. Nuestras almas entran en el mundo de
los espíritus a partir de una experiencia de muerte, y lo que no sea así es
antinatural. Si bien es cierto que se podría llevar, mentalmente, al
cliente a la puerta principal, este torpe procedimiento también necesita
tiempo. Después de todo, una experiencia de vida pasada es solo una parte,
abreviada, dentro de la hipnosis de regresión espiritual.
B. Apresurar el viaje directo
al mundo espiritual, hará que su cliente pierda toda la belleza que supone
dejar su cuerpo y entrar, de forma natural, en el reino celestial. Sus clientes
pueden llegar bastante perdidos, con nadie que les acoja. No descubrirán cuáles
son las paradas usuales del viaje, o cómo se reúnen, normalmente, con sus
grupos espirituales. A partir de nuestras anteriores escenas de muerte,
aprendemos cómo entra el alma en el mundo espiritual. ¿Es algo rápido, o lento?
¿Se quedan, o no, dando vueltas sobre el escenario de su muerte para comunicarse
con sus familiares queridos? Su primer contacto en el mundo espiritual, ¿es con
su guía, o con su alma compañera?
C. Finalmente, revisar una vida
anterior permite un mejor calentamiento, o entrenamiento, de la memoria
espiritual para que el cliente pueda dar el gran paso de su total inmersión en
su mente superconsciente. Un cliente que no haya pasado la regresión normal
previamente, será lento en responder a preguntas sobre lo que ve y siente. Por
tanto, atravesar una experiencia de vida pasada en la hipnosis VEV, permite al
cliente familiarizarse con el proceso, y ser más sensible a preguntas sobre el
mundo espiritual.
Podríamos
preguntarnos también; ¿Acaso no es tan brusco, para el cliente, llevarlo desde
su condición de feto a la vida pasada, como llevarlo, directamente, al mundo
espiritual desde el vientre de la madre? Mi respuesta es que, aquí, existe una
diferencia pues, con la transferencia desde el feto a la vida pasada, usted
toma un ser, desde su encarnación física, y lo lleva adentro de otra encarnación física y, en este
caso, la mayoría de los clientes no están, todavía, en estado de alma
superconsciente. Considere, también, que el verse envuelto en una escena de
muerte física da al sujeto más tiempo para ajustarse a su estado de alma, ya
que se ve salir y flotar, y vagar sobre su cuerpo; cosa que no ocurre con la
inmediata entrada en el mundo del espíritu desde el vientre de la madre.
Mientras la elección de cualquiera de estas dos técnicas no será un asunto
importante para almas avanzadas, estas almas no constituirán la mayoría de su
clientela.
En el
momento en que empiezo a llevar al cliente desde el vientre de su madre a una
vida pasada, le hago visualizar un largo túnel que le transportará a su más
inmediata vida pasada, (o a aquella vida que tenga para él un mayor
significado, si es lo que prefiere el sujeto). Se transporta al cliente, desde
la oscuridad del vientre materno, a un túnel temporal, también oscuro. Estas
son mis instrucciones:
"Quiero que se imagine que se mueve, ahora, dentro de
un largo túnel, que le llevará a su más inmediata vida pasada. Este túnel del
tiempo, tiene el aspecto de túnel ferroviario, pero es mucho más suave y
limpio. Visualice un perfecto cilindro circular, con una entrada, y una salida.
Según nos movemos por dentro de la amplia y redonda entrada, se dará cuenta de
que todo, a nuestro alrededor, es negro. Mientras cuento, rápidamente, de diez
a uno, verá cómo el color de la pared curva del túnel va cambiando a gris. Al
llegar a cinco, será muy blanca. Entonces, usted vera una enorme, redonda y
brillante apertura que es el fin del túnel. Pasaremos a través de esa apertura
cuando llegue al número, uno y, entonces, estaremos en una escena significativa
de su vida pasada. Usted no sabe ahora qué escena será, pero en el momento en
que yo diga, uno, usted estará en otro tiempo y lugar, en otro cuerpo, pero
usted sabrá que ese cuerpo es usted mismo".
Si trato
con un cliente sensible, que no produce una buena visualización, le concentraré
en tocar, sentir y en conectarse, emocionalmente, con el paso a través del
túnel oscuro. Si en este paso existen dificultades con un sujeto indeciso, o
renuente, una vez más, (igual que vimos antes con las escenas de la escalera,
la infancia y el útero), puedo requerir del cliente una señal ideomotora que
implique a los dedos de su mano, de esta forma:
"Levante los dedos de su mano derecha, si usted está
listo para moverse, ahora, y conmigo, a través del túnel de tiempo. Levante los
dedos, de su mano izquierda, si desea esperar, hasta que empiece a contar para
empezar esta fascinante experiencia".
Puesto
que voy a empezar la cuenta casi inmediatamente, elegir entre estas dos cortas
opciones, (dado el poco tiempo que concedo a la elección), permite poco tiempo
para que el cliente se resista.
El final
de mis instrucciones del túnel, es como sigue:
"Diez. Está fuera del vientre de su madre, y dentro
del oscuro túnel y, ahora, vamos a tomar velocidad. Nueve, más y más rápido. Ocho,
observe cómo las paredes se vuelven grises poco a poco. Siete. Seis. Cinco, las
paredes son ahora, blancas, y usted puede ver una enorme, y redondeada,
apertura frente a usted; una apertura que le llevará a una escena importante de
su vida pasada. Cuatro. Tres. Dos. ¡UNO! .¡Ya salimos del túnel!".
Bien.
Dado el contexto de este libro, nos concentraremos en la metodología de la vida
entre vidas, es decir, el método VEV, en vez de en el método de regresión a
vidas pasadas. Por consiguiente, solo describiré, brevemente, la siguiente
serie de preguntas que se formulan una vez que el cliente ya llegó a su vida
pasada.
1. Antes que nada, dígame: ¿es
de día, o es de noche?
2. ¿Hace frío, o calor?
3. ¿Está dentro, o está fuera?
4. ¿Se halla en una ciudad, un
pueblo pequeño, o en el campo?
5. ¿Está solo, o en compañía?
6. ¿Está vestido?
7. ¿Es hombre, o mujer?
8. ¿Es una persona pequeña,
mediana, o grande?
9. ¿Qué está haciendo?
A causa
de sus instrucciones, muchos clientes, escogerán llevarle a una escena
significativa de sus vidas que será, normalmente, la de su más inmediata vida
pasada. Debe prepararse para que algún suceso emocional se despliegue a partir
de esa escena. Frecuentemente, será un acontecimiento de muerte. Usted querrá
saber el nombre de su cliente en esa vida, su edad y circunstancias familiares,
así como datos geográficos de la localización si es posible, y los sucesos que
llevan a esa escena.
En esos
momentos, interrogo sobre las personas importantes de su vida. Si el sujeto
responde bien, con muy buenas descripciones y un alto grado de implicación,
podría preguntarle quiénes son las más importantes personalidades de esa vida,
que se manifiestan en su vida actual. El éxito de las respuestas, en este
momento, no depende tanto de lo avanzado que sea el alma como de su nivel de
vínculo hipnótico. Así, con algunos clientes, esta pregunta deberá aguardar
hasta que esté en el mundo del espíritu. Trato de no consumir más de quince, o
treinta minutos, en esta vida pasada, pues quiero llevarle a su experiencia de
fallecimiento tan rápido como se posible.
Desde la
escena inicial, (siempre que no sea una escena de muerte), podría mover al
sujeto hacia adelante, en incrementos de cinco o diez años, para ponerme al
corriente de esa vida. En el momento adecuado, diré al cliente:
"Muy bien. Ahora quiero que nos movamos al último día
de su vida cuando cuente tres. Uno. Dos. ¡TRES!. Descríbame lo que
sucede".
Si el
sujeto está muriendo de vejez, le pregunto sobre lo que le rodea; si alguien le
atiende, y cómo se siente. Con escenas de fallecimiento más traumáticas, le
llevaré a través de ellas muy rápido.
3.9. Comprobando
Interferencias Conscientes.
Cuando
hablé de llevar al cliente hacia su infancia al principio de la sesión, dije
que usted debería comprobar si el sujeto, en realidad, siente y piensa que es
la persona joven que fue en su día, en vez de esforzarse por recordar,
conscientemente, tiempos y lugares de ese momento anterior. En este momento, la
cuestión es la de la profundidad del trance.
Sin
embargo, cuando usted alcanza una vida pasada, otro problema en la recuperación
de recuerdos puede serle muy evidente. Esto tiene que ver con unos pocos
clientes que producen recuerdos defectuosos por causa, pura y simplemente, de
la interferencia de la mente consciente. Este asunto de recibir información
alterada o contaminada debe aclararse antes de proceder a la regresión
espiritual.
Tras
llevar a su cliente a su vida pasada, debe estar alerta y comprobar si el
sujeto recupera recuerdos de su vida, únicamente, a partir de detalles
históricos almacenados durante su línea temporal de ese momento. El sujeto, muy
bien podría usar su imaginación a causa de una consciente atracción hacia
ciertos y bien conocidos acontecimientos, o mitos, que le sean familiares.
Aquí, entran en acción prejuicios y predisposiciones. Yo llamo a este fenómeno,
"la atracción Atlántida",
porque mucha gente está subyugada por esta historia.
Usted
podría encontrarse con esta situación en la entrevista personal, cuando el
cliente afirme lo siguiente; "Sé, que nos encontraremos con que, una vez,
viví en la Atlántida". Esta convicción se centra sobre un deseo del
cliente; el de haber pertenecido a una legendaria y temprana, civilización
terrestre.
No hay
mal, ni error, en que un cliente tenga conocimientos previos, y conscientes
sobre la historia del mundo, pues ello puede ayudar a identificar escenas del
pasado. Sin embargo, usted debe estar alerta sobre el hecho de que, algunos
aspectos del pasado, incluso aquellos que son mitológicos, pueden ser tan
atractivos al cliente, que conduzcan su memoria y le distorsionen sus
recuerdos. El uso de una señal ideomotora del cliente, para interrumpir el
discurso y, así, desenganchar la interferencia del pensamiento consciente, es
productivo. Ilustraré un caso de, "atracción Atlántida", con este
ejemplo:
"Facilitador.
Dígame. ¿En dónde está usted, ahora?
Sujeto. En la
Atlántida.
Facilitador. Muy
bien. Paremos un momento. Quiero que, ahora, se tome su tiempo para pensar, cuidadosamente,
lo que acaba de decirme. No hablaremos entre nosotros, hasta que usted haya
revisado todos sus recuerdos para verificar que, en efecto, usted está en la
Atlántida. Cuando haya finalizado el examen para saber dónde está usted,
realmente, hágamelo saber elevando los dedos de su mano derecho. No volveré a
hablar, hasta ver que sus dedos se mueven.
Sujeto. (Después
de guardar una larga pausa, y de elevar los dedos). Oh, Supongo que estaba
equivocado en lo de la Atlántida, pues parezco ser un nativo en una hermosa
isla, en medio de un océano".
Tengo
más que decir sobre la Atlántida, bajo la sección; "Revisando
Reencarnaciones de Vidas Pasadas", particularmente en lo que atañe a las
almas híbridas.
Otro
término que uso, ante información deficiente, es el de; "Síndrome de la Persona Importante".
Los clientes que agrupo bajo esta categoría, quieren ser gente famosa. Son
muchos los practicantes de regresión a vidas pasadas que han tenido un
considerable número de clientes que afirman ser gente famosa antes de que la
posterior revisión de sus vidas establezca lo contrario. En uno de mis tres
casos de ser Mérilyn Mónrou, mi cliente descubrió, posteriormente, que era en
realidad el ama de llaves de la actriz. Las ideas preconcebidas de mi cliente
se deshicieron cuando le pedí que regresara a una escena en la que otra gente
estuviera con Mérilyn Mónrou, y le solicité que identificara a cada persona,
entre las que estaba mi cliente como parte de la escena.
En la
regresión a la vida entre vidas, la buena noticia es que, una ven en el mundo
del espíritu, la mente consciente no parece interferir, en grado alguno, sobre
la superconsciencia, excepto cuando se repasan encarnaciones de vidas pasadas.
Un primer ejemplo de interferencia del consciente, al que me enfrento en el
trabajo de VEV, ocurre con un pequeño porcentaje de clientes, y se refiere sus
informes, cuando están cerca de la primera parada, dentro del mundo del
espíritu y afirman, espontáneamente, que son seres de luz azul y, por tanto,
almas altamente avanzadas. No tenía este problema antes de que mis libros se
publicaran.
La
verdad puede verse empañada por deseos fantásticos, fuertes sistemas de
creencias, miedos represados o la simple infelicidad de una vida actual, que el
cliente piensa que es sin interés. Aquellos recuerdos del sujeto, de los que
usted sospecha porque parecen deficientes al recoger una mala interpretación
consciente, deben manejarse con suave desafío, o cortés cuestionamiento
crítico.
En la
regresión VEV, y en la regresión a vidas pasadas, debe evitar al cliente
largas, extensas o complejas preguntas. Puesto que quiere animar al sujeto a
procesar lo que ve y siente, sus preguntas deben ser cortas, simples y
directas.
El
secreto para ganar información precisa y exacta, es la persistencia y la
verificación cruzada, o transversal, de esa información. Es efectivo moverse
hacia adelante, y hacia atrás, en varios períodos de tiempo, sobre un mismo
tema. Comprobar y revisar lo informado, para verificar la consistencia, es
también muy útil para el sujeto. Si usted guía a su cliente con cuidado, dentro
de su estado alterado, y trabaja a través de sus percepciones e
interpretaciones durante la evocación de su vida pasada, con tiempo, el cliente
alcanzará la puerta al mundo del espíritu y estará mucho mejor preparado para
proporcionar información precisa y exacta.
Estos
comentarios que hago sobre información defectuosa podrían llevar a algunos a
cuestionar la validez de todo el proceso de hipnoterapia. Esto sería una
suposición errónea pues, de acuerdo a mi experiencia, solo una pequeña porción
de mis clientes tienen una real interferencia consciente. La gente no miente,
de forma deliberada, bajo hipnosis. Algunos, sin embargo, pueden malinterpretar
lo que creen, con la verdad de lo que es.
En la
mayoría de las ocasiones, el pensamiento consciente trabaja a nuestro favor.
Tomemos el ejemplo de recordar localizaciones geográficas y fechas. Los
críticos de la regresión a vidas pasadas se preguntan cómo es posible que,
alguien que revive una vida, durante los tiempos antiguos, pueda darnos una
solución exacta de dónde estuvo, señalándolo en un mapa del mundo actual. La
respuesta reside en el hecho de que, la mente consciente, retiene el
conocimiento moderno, es decir, el que tiene al momento de la hipnosis, en este
caso tanto el geográfico como el del marco temporal. No digo que el recordar
esa información sea algo fácil para la mente consciente. Con las fechas, suelo
pedir al cliente que visualice los números, y que luego me los lea, uno detrás de
otro.
El
siguiente caso, demuestra una confusión con las fechas, que se centra en torno
a la interferencia mental que implicaba vergüenza y culpabilidad por una vida
pasada. Tuve un cliente, de treinta y dos años, una judía nacida en 1964. En su
inmediata vida pasada fue un soldado austriaco, que persiguió a los judíos en
un campo de concentración, durante la Segunda Guerra mundial. En esa vida
austriaca, había nacido en 1920. Cuando le pregunté a qué edad había muerto me
dijo, con demasiada rapidez, que a los ochenta y seis. Me di cuenta de que a
esa edad, ella, como austriaco, aun estaría viva en el año 2006, es decir, un
tiempo más allá, incluso, de la sesión de regresión en la que estábamos. Tras
poner en duda la fecha que me daba, supimos que, en la guerra, el antiguo
soldado nazi se suicidó a la edad de cuarenta y dos años, (en 1942), a causa de
los remordimientos que le consumían por los salvajes actos cometidos. Dos años
más tarde de esa muerte, el alma se encarnaba en la persona de mi cliente judía.
En la
otra cara de la moneda, hay signos positivos que indican que existe
credibilidad en el recuerdo, signos que debe buscar mientras realiza sus
investigaciones. Los siguientes son tres ejemplos:
A. ¿El sujeto tiene una
experiencia, poco común y preocupante, sobre su género? Un sujeto
masculino podría volver a vivir una vida anterior como mujer, o
viceversa. La lucha interna de su cliente aquí, presta validez a toda la
experiencia.
B. ¿Existe incertidumbre al
inicio del recuerdo de vidas pasadas, sobre cómo se desarrolla una escena, que
luego se convierte en una firme convicción? Esto es un indicio de
cuidadosa deliberación, por parte del sujeto, al procesar la incertidumbre,
(como ocurrió en el caso de Andy y Otis, citado anteriormente).
C. ¿Hay cambio emocional en el
sujeto, a medida que surge la información, por ejemplo, pasa de un relato plano
a otro con sentimientos más intensos por la implicación personal? Esta
transferencia, significa que el sujeto se mueve, del desapego, a un estado de
más participación real.
En la sección sobre las ideas preconcebidas del cliente, me referí a las influencias externas previas a la sesión VEV, tanto por parte del cliente como del terapeuta. Sin embargo, durante la sesión misma, se deberían vigilar las interferencias conscientes mediante la comprobación de la profundidad del trance hipnótico. Por ejemplo, a la puerta del mundo espiritual, un cliente deprimido, lleno de inseguridades religiosas y sentimientos de falta de mérito, podría esperar ser llevado a un oscuro lugar infernal si la psique humana todavía domina. Pedir a su cliente aclaraciones que se basen en su propia y verdadera sabiduría interior o, en su lugar, trabajar a través del alma compañera con la que tiene un fuerte vínculo, o de su espíritu guía, propiciará que, a las puertas de mundo del espíritu, dé comienzo el proceso de reducción de las interrupciones psicológicas que promueve el ego, al filtrar la información. Esto permite que el sujeto, más adelante, se disocie de su personalidad temporal en esta vida, en favor de su permanente identidad como alma.
Por lo
general, en el momento en el que el sujeto caiga en el profundo estado de
superconsciencia, y vaya recordando las experiencias del mundo del espíritu, su
ser superior será el que domine la situación y las interferencias conscientes
disminuirán, en gran medida, o desaparecerán por completo.
gracias por compartir, muy util e interesante.Verónica
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